Cantares 1: 15 al 17. 15 ¡Cuán bella eres, amada mía!, ¡Cuán bella eres! ¡Tus ojos son dos palomas! La amada 16 ¡Cuán hermoso eres, amado mío!, ¡Eres un encanto! El amado Una alfombra de verdor es nuestro lecho, 17 los cedros son las vigas de la casa y nos cubre un techo de cipreses. La amada......................Nuestras esposas son como la rosa en el desierto, como lirios entre espinos, añaden a nuestro corazón el deseo de vivir, son el fresco perfume que esparce el aroma del amor. Nuestras esposas pacientes llevan sobre sus hombros la tolerante pena de los sufrimientos de los hijos y aún los nuestros, cuando el dinero falta, cuando la salud nos aflige, ellas son pacientes y economizan en todo como preparando el futuro hacen trenzas y añaden al hogar el equilibrio que nos dá bienestar, gracias a DIOS por todas las esposas del mundo que con su paciencia nos ayudan a sobrevivir, Proverbios 31: 23 al 31. Endulzan con su paciencia la labor del hogar guiadas por DIOS son como el pastor y el obispo de nuestras almas, por el afecto consejo con que nos aconsejan, I Pedro 3: 1 al 6. En un vaso frágil un perfume muy caro para perfumar a un rey, nuestro DIOS nos la dió de corona..................................Dios las bendiga a todas.
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